El principal reto del Gobierno español es reconocer que se encuentra sometido a alternativas contrapuestas que no podrá resolver por sí solo.
El Círculo de Empresarios ha propuesto, recientemente, una reforma de las administraciones que reduzca su peso hasta estar comprendido entre el 35 y el 40 % del PIB. Pero, a la vez, se reclama que el sector público vuelva a ser el motor más importante de la economía española. Si a esto sumamos las limitaciones que nos impone Bruselas, habremos cuadrado el círculo (no el de empresarios, por supuesto).
El sector público necesita al sector privado y viceversa. Tienen que desarrollar una relación win-win, que destierre posicionamientos basados en orientaciones políticas. En Gran Bretaña, país en donde la colaboración público-privada está muy extendida, el peso del sector público es del 41%. Esta estrategia de contratación fue puesta en marcha por Margaret Thatcher y continuada por gobiernos laboristas aplicando el reconocido pragmatismo británico.
En opinión del Foro y en relación con la colaboración público-privada en España, hay que poner en marcha un conjunto de medidas para no desperdiciar la oportunidad que se representan los Fondos 2014-2020:
- Plan conjunto y acciones coordinadas de los Ministerios de Economía, Hacienda y AAPP e Industria, impulsado por la Vicepresidencia del Gobierno.
- Amplio plan de difusión y formación a los diferentes niveles de la administración pública que intervendrán en los procesos de compra pública, para que no solo contemplen la adquisición de tecnologías muy contrastadas y maduras.
- Una definición objetiva y basada en evidencia de las políticas públicas que se pueden poner en marcha gracias a estos fondos para que se adecúen a las necesidades de la sociedad española, aprovechando la experiencia del sector público y el conocimiento tecnológico del sector privado.
- Una evaluación rigurosa de los resultados obtenidos que se debe contemplar desde el diseño de las actuaciones.
- Plan de difusión a empresas tecnológicas y centros de investigación, sobre los fondos disponibles y las novedades que representa la nueva ley de contratación del sector público.
- Potenciar la asociación de empresas multinacionales, pymes y centros de innovación españoles.
- Creación del observatorio de la colaboración público-privada para el sector tecnológico, que consolide y difunda las mejores prácticas que se realicen en España, poniendo especial foco en contratos de compra innovadora, asociación para la innovación y concesión de servicios.
Estamos ante una oportunidad histórica si construimos y ponemos en marcha un plan que posibilite la ejecución de los diferentes programas operativos previstos, con la debida transparencia y control.