El Modelo Alzira de colaboración público-privada impulsado por la Generalitat Valenciana, se ha consolidado como un modo de gestión integral de la salud, ágil, eficiente y eficaz, centrado en las necesidades del ciudadano y en el que el profesional adquiere un papel de máximo protagonismo. Todo ello se ha traducido en unos excelentes resultados asistenciales con altos niveles de satisfacción de los usuarios.
La experiencia positiva ha convertido el modelo en paradigma de una nueva forma de gestión sanitaria que se está implantando con la construcción de otros centros y está siendo estudiado con interés por organismos e instituciones nacionales e internacionales.
En la Comunidad Valenciana, los hospitales de La Ribera, Torrevieja, Denia, Manises y Vinalopó y en la Comunidad de Madrid los hospitales de Valdemoro, los futuros centros de Torrejón, Móstoles y Collado Villalba, y el Laboratorio Clínico Central, se gestionan bajo la fórmula de concesión administrativa, por la que la Administración Pública paga al concesionario una cantidad anual por cada uno de los habitantes del Área de Salud para que sean atendidos. El control de la prestación sanitaria corre a cargo de la Administración y la inversión inicial y dotación de recursos materiales y humanos, así como el riesgo financiero, se transfiere a las empresas concesionarias.